VITAMINA B8 BIOTINA
La Biotina es una vitamina del grupo hidrosoluble, segura en su ingesta aunque gran parte la sintetiza nuestra flora bacteriana intestinal.
Es esencial, en nuestra dieta, para generar grasas en nuestro organismo y posteriormente degradar las grasas, también interviene en la degradación de algunos aminoácidos.
La biotina es un importante cofactor de enzimas que interviene en el catabolismo y reacciones metabólicas.
Se debe tener en cuenta que el huevo crudo contiene avidina e impide la absorción de la biotina en el intestino, por esta razón es interesante comer el huevo cocinado, (la avidina se desnaturaliza en la cocción y pierde su función).
Se considera una ingesta segura y adecuada de B8 entre 200 a 300 ug diarios.
Como hemos dicho anteriormente gran parte la sintetizan los lactobacilos de nuestra flora bacteriana, por esta razón los antibióticos pueden comprometer la producción de esta y otras vitaminas como ocurre con la vitamina K.
Se la relaciona con el aumento de apetito, importante en cierto tipo de pacientes.
Es interesante suplementarla en personas que se someten a altas dosis de antibióticos (como sucede para erradicar el Helicobacter Pilori, que es bastante frecuente) y otro tipo de tratamientos de antibióticos.
En casos de alcoholismo, ingesta de huevos crudos, fumadores, antibióticos, es importante tener en cuenta este micronutriente.
Alimentos que contienen cantidad de biotina son:
- el hígado,
- los productos lácteos,
- setas y verduras,
- pescados,
- legumbres,
- cereales integrales,
- huevos.
Como ya hemos mencionado, gran parte de este micronutriente se sintetiza en nuestro intestino.
Tener una buena flora bacteriana influye no sólo en cómo nos encontramos a nivel general de salud sino en las repercusiones que tiene en todos los sistemas. Al tubo digestivo se le conoce como segundo cerebro y tanto es así que hay comunicación directa entre el cerebro y el intestino, a este sistema nervioso se le conoce como sistema nervioso entérico y es de vital importancia.
Es conveniente saber que el estrés mental, los componentes emocionales, la depresión y otros trastornos como la ansiedad, conseguirán que tengamos una disbiosis (desequilibrio) en nuestra flora intestinal y que las bacterias cohabiten en equilibrio es vital para sentirnos bien.