LEVADURA Y SU APORTE NUTRICIONAL

Las levaduras son hongos microscópicos con forma unicelular perteneciente a las células eucariotas. Tienen una función principal para descomponerse mediante fermentación, normalmente alcohólica, a través de los hidratos de carbono produciendo ciertas enzimas y sustancias.

Las levaduras se utilizan en la elaboración de cerveza, vino, hidromiel, antibióticos, pan, derivados lácteos como los yogures, etc.

La levadura, en nuestro organismo, tiene efectos beneficiosos pues nos aporta vitaminas del grupo B ya que contiene folatos, riboflavina, tiamina, niacina, hierro, selenio, magnesio y zinc.

Todos estos micronutrientes hacen que la levadura en nuestro cuerpo tenga funciones importantes para nuestra salud.

De las diferentes levaduras existe “la levadura de arroz rojo” que es un arroz rojo fermentado y está recubierto de una capa de moho. Según la medicina tradicional china se toma para vigorizar el cuerpo, ayuda en la digestión y revitaliza la sangre. En nuestra cultura en la década de 1970 se aislaba la “lovastatina” y la “monacolina”.

La Lovastatina y otros fármacos prescritos del tipo estatinas inhiben la síntesis de colesterol. Estudios científicos han demostrado que el uso de las estatinas reduce los niveles de colesterol malo LDL entre un 24-49%.

Por ello, consumir levaduras tiene un aporte beneficioso para nuestro organismo porque nos ayudan en la población bacteriana de nuestro tubo digestivo, nos aportan micronutrientes esenciales en las reacciones de nuestro cuerpo y, en ciertos casos, se pueden utilizar como terapia en los pacientes.

Por lo tanto, las levaduras son beneficiosas para nosotros.

Os dejo un dato que, cuanto menos, es interesante: tenemos más bacterias en el intestino que células en todo el cuerpo, se estima que tenemos más de 100 billones de bacterias y se estima que tenemos 2 kg de peso de nuestro cuerpo son bacterias, “somos un universo de bacterias”.

¡Apúntate a los beneficios de la levadura y tu organismo te lo agradecerá!

 

 

VITAMINA B9 ÁCIDO FÓLICO

El ácido fólico es vitamina hidrosoluble del grupo B y tiene un papel muy importante.

Participa en la formación de proteínas y está presente en los glóbulos rojos que transportan el oxígeno a las células. La causa de su carencia es la mala alimentación o un déficit genético.

Es de vital importancia en el embarazo, tal es así que si la madre tienen niveles adecuados de ácido fólico antes de quedarse embarazada puede prevenir deformaciones en la placenta, defectos de nacimiento en el cerebro y la columna vertebral del bebé.

Por lo tanto planificar el embarazo mirando los niveles de ácido fólico de la mamá antes de la concepción puede ser una manera sencilla y económica de reducir los riesgos del propio embarazo en la formación del feto.

El folato es necesario en la producción de nuevas células y su mantenimiento, también para la replicación del ADN.

Alimentos ricos en ácido fólico son:

  • las legumbres,
  • los cereales integrales,
  • los frutos secos como las semillas de girasol.

Por este motivo de vital importancia es por lo que recomendamos evitar los productos refinados y aportar alimentos integrales, como los cereales, en nuestra dieta ya que, además de aportarnos más nutrientes nos aportan fibra necesaria para la salud del tubo digestivo y su tránsito. En el proceso de refinado se pierde gran parte de las vitaminas “esenciales” para el organismo.

La alimentación es un factor muy importante en la prevención de enfermedades.  La nutrición y el estilo de vida son determinantes para preservar nuestra salud.

Muchas veces comemos sin pensar en lo que nos aportan los alimentos, lo hacemos por placer, sencillez a la hora de adaptarnos a la vida laboral y los quehaceres diarios, pero no nos damos cuenta de que en los alimentos están los precursores de nuestra salud.

El organismo necesita vitaminas, minerales y oligoelementos esenciales para su desarrollo y muchas veces con la comida rápida, el exceso de sal y grasas saturadas, productos refinados como los azúcares y las harinas conseguimos deteriorar nuestra salud e incrementar el riesgo de alteraciones en la salud, como sucede con el sobrepeso, la hipertensión y enfermedades vasculares y metabólicas.

Recordar “somos lo que comemos” o más aún “somos lo que absorbemos en el intestino”.

ABORDAJE NUTRICIONAL EN LAS ENFERMEDADES REUMÁTICAS

La enfermedad reumática es un trastorno que afecta a las articulaciones y tiene más de 100 manifestaciones distintas de la inflamación y la pérdida de función del tejido conjuntivo y articulaciones, tendones, ligamentos, huesos, músculos e incluso órganos internos.

Algunas de ellas tienen un componente directo autoinmune (el propio sistema inmunológico del paciente por error ataca a los tejidos sanos del organismo).

Es importante afrontar estas enfermedades desde un punto de vista clínico con abordaje farmacológico, tratamientos físicos como la fisioterapia y desde la nutrición.

En estos pacientes, seguir un plan nutricional adecuado en proteínas, energía, rico en vitaminas, minerales y ácigos grasos poliinsaturados (omega 3 / 6 / 9), puede promover un efecto beneficioso contra el daño tisular y la supresión de la actividad inflamatoria.

Por citar un ejemplo en tratamientos de artrosis es importante vigilar  el control del peso del paciente para evitar sobrecarga en la articulación, una dieta adecuada en calcio, ácido fólico, vitamina B6, D y K, el magnesio y seguir unas pautas antiinflamatorias.

En los pacientes que sufren artritis reumatoide, que tiene un componente directo autoinmune, es interesante tener en cuenta el equilibrio en la flora bacteriana de nuestro intestino y que las bacterias cohabiten en simbiosis en nuestro organismo ya que tiene un efecto directo en nuestro sistema inmunológico porque gran parte del sistema inmune reside en nuestro intestino. Tal es la importancia de la salud de nuestro tubo digestivo que se le conoce como “segundo cerebro”, entre el intestino y nuestro cerebro pasa información constantemente y se conoce como sistema nervioso entérico.

Al final el organismo tiene una comunicación y relación global y lo que afecta en una articulación puede tener relación con un desequilibrio intestinal o un problema de permeabilidad en el intestino.

Los desequilibrios que aparecen en nuestras articulaciones no son siempre irreversibles, podemos abordarlos desde distintos puntos.

 

ESTUDIO PERSONALIZADO EN CONSULTA

En la consulta de nutrición valoramos el estado del paciente (sea deportivo, obesidad, patológico, etc) y se tienen en cuenta diferentes factores como la edad, el sexo, su relación con la comida…
Con toda esta información sacamos el perfil nutricional que mejor se adapta a las necesidades del paciente.
Ya sabéis que según las necesidades de cada uno, los porcentajes bromatológicos cambian y no se trata de la misma manera a un paciente oncológico, a un deportista o un adolescente.
En la consulta siempre cuantificamos de forma objetiva (por bioimpedancia eléctrica) cuál es la composición del cuerpo en ese momento y podemos supervisar de forma estrecha la evolución y realizar los ajustes  necesarios.
Cada persona es diferente tanto en necesidades como en su relación con la comida, por ello se establece una dieta adaptada a las necesidades de cada persona.
Recordar que no existen las dietas milagro. El concepto de «estar a dieta» fracasa siempre.

VITAMINA B8 BIOTINA

La Biotina es una vitamina del grupo hidrosoluble, segura en su ingesta aunque gran parte la sintetiza nuestra flora bacteriana intestinal.

Es esencial, en nuestra dieta, para generar grasas en nuestro organismo  y posteriormente degradar las grasas, también interviene en la degradación de algunos aminoácidos.

La biotina es un importante cofactor de enzimas que interviene en el catabolismo y reacciones metabólicas.

Se debe tener en cuenta que el huevo crudo contiene avidina e impide la absorción de la biotina en el intestino, por esta razón es interesante comer el huevo cocinado, (la avidina se desnaturaliza en la cocción y pierde su función).

Se considera una ingesta segura y adecuada de B8 entre 200 a 300 ug diarios.

Como hemos dicho anteriormente gran parte la sintetizan los lactobacilos de nuestra flora bacteriana, por esta razón los antibióticos pueden comprometer la producción de esta y otras vitaminas como ocurre con la vitamina K.

Se la relaciona con el aumento de apetito, importante en cierto tipo de pacientes.

Es interesante suplementarla en personas que se someten a altas dosis de antibióticos (como sucede para erradicar el Helicobacter Pilori, que es bastante frecuente) y otro tipo de tratamientos de antibióticos.

En casos de alcoholismo, ingesta de huevos crudos, fumadores, antibióticos, es importante tener en cuenta este micronutriente.

Alimentos que contienen cantidad de biotina son:

  • el hígado,
  • los productos lácteos,
  • setas y verduras,
  • pescados,
  • legumbres,
  • cereales integrales,
  • huevos.

Como ya hemos mencionado, gran parte de este micronutriente se sintetiza en nuestro intestino.

Tener una buena flora bacteriana influye no sólo en cómo nos encontramos a nivel general de salud sino en las repercusiones que tiene en todos los sistemas. Al tubo digestivo se le conoce como segundo cerebro y tanto es así que hay comunicación directa entre el cerebro y el intestino, a este sistema nervioso se le conoce como sistema nervioso entérico y es de vital importancia.

Es conveniente saber que el estrés mental, los componentes emocionales, la depresión y otros trastornos como la ansiedad, conseguirán que tengamos una disbiosis (desequilibrio) en nuestra flora intestinal y que las bacterias cohabiten en equilibrio es vital para sentirnos bien.

 

EXCESO DE ALCOHOL EN NUESTRO ORGANISMO

Exceso de alcohol “resaca”

El etanol que es una molécula que se encuentra en las bebidas alcohólicas es una molécula tan pequeña que se absorbe nada más entrar en nuestro cuerpo, la boca. Esa partícula tiene la capacidad de atravesar todas las barreras y partes de nuestro cuerpo y, por este motivo, afecta a nuestro sistema nervioso (atraviesa la barrera hematoencefálica), la placenta, etc.

Las bebidas alcohólicas de baja graduación, ingeridas con moderación, puede ser saludables. El vino tiene efectos antioxidantes, la cerveza contiene nutrientes de los hidratos de carbono, el lúpulo y demás sustancias.

Hasta aquí el aspecto positivo de las bebidas alcohólicas de baja graduación y consumidas con moderación.

Es importante destacar que es un depresor de nuestro sistema nervioso central y, por ello, nos sentimos deprimidos después de una ingesta de alcohol importante.

Debemos saber que el exceso de alcohol produce un descenso en la absorción de vitaminas y minerales; cuando sufrimos pequeñas amnesias tras la ingesta de alcohol es porque se ha agotado la vitamina B.

Es un potente diurético y puede provocar que nos deshidratamos, cuando se produce dolor de cabeza es por deshidratación.

El alcohol es un tóxico y es un agente carcinógeno al  igual que lo es el tabaco. Al contrario del tabaco, que no nos aporta nada, el alcohol nos aporta energía: 7 Kcal por gramo de alcohol pero este tipo de energía carente de nutrientes no le interesa para nada a nuestro organismo.

Es importante recalcar que genera adicción, por eso su consumo debe ser moderado y responsable.

Cuando hayamos ingerido alcohol en dosis elevadas, lo mejor es hidratarse bien con agua y el consumo de frutas y verduras nos restablecerán el equilibrio electrolítico y de micronutrientes que necesita nuestro organismo para recuperarse y conseguir una resaca más suave, un buen ejemplo pueden ser los caldos vegetales ricos en vitaminas y minerales que consiguen que nos encontremos mejor.

Recordar que el alcohol se debe consumir siempre con moderación y cuanto menor sea su graduación menos daño producirá en nuestro organismo.

¡Consumo responsable por favor!

ALIMENTACIÓN EN LA EDAD ESCOLAR

Los niños y los adolescentes necesitan tener una alimentación que sea de calidad, pues tienen grandes demandas energéticas (crecimiento, actividad física, estudios). Dependiendo de su edad, el sexo, condición física y salud varían sus necesidades, un niño de 14 años necesita en torno a 2800 Kcal al día, por citar algún ejemplo.

Las calorías deben repartirse en su dieta, a lo largo de todo el día y es importante que realicen la media mañana y la merienda para evitarles periodos de hipoglucemia y mantener su bienestar.

Elaborar un menú a un adolescente o niño tiene que cubrir no sólo sus demandas energéticas sino nutrientes en las proporciones adecuadas. Los hidratos de carbono, las grasas y las proteínas que necesitan han de estar repartidos de manera proporcionada. La grasa del pescado es importante para ellos, las frutas, frutos secos, legumbres, cereales de grano entero, lácteos, carnes blancas, que deben estar presentes en su dieta diaria.

Meriendas o medias mañanas ricas en galletas industriales, productos azucarados, zumos envasados procedente de concentrado, chucherías que cada vez se consumen más a diario, no sólo no les aporta los nutrientes que su organismo necesita sino que es perjudicial para la salud.

Hay un índice de obesidad infantil muy alto y la tendencia es creciente. El sobrepeso y la obesidad no es sólo una cuestión de estética que le puede hacer daño al niño sino que le predispone a ser obeso en la etapa adulta, le aumente el riesgo de diabetes, enfermedades vasculares e innumerables perjuicios para su salud.

Acostumbrar a nuestros hijos a que se alimenten de manera natural no tiene por qué ser aburrido, ellos se adaptan y los hábitos hacen las costumbres.

Por lo tanto una dieta variada y equilibrada les garantiza los nutrientes que necesita su organismo para desarrollarse con salud y bienestar, tanto físicamente como neurológicamente.

Nuestro es lo que más queremos en este mundo, cuidar de ellos a través de la alimentación debería ser prioritario.

 

EJERCICIO FÍSICO COMO SEGURO DE VIDA

Practicar ejercicio físico de manera regular tiene unos beneficios para la salud ampliamente demostrados científicamente, además de llevar una dieta equilibrada.

La práctica regular de ejercicio nos aporta innumerables beneficios tanto físicos como psíquicos.

Disminuye los niveles de estrés mental, ansiedad, depresión, mejora la autoestima, lo que sucede en el cerebro con el ejercicio es una descarga hormonal que nos aporta bienestar y calma, nos hace sentirnos estables y equilibrados.

En lo referente al cuerpo no os descubro nada si os digo que disminuyen las enfermedades vasculares, los riesgos de cáncer, diabetes, osteoporosis y mucho más.

Si el ejercicio físico es tan beneficioso y es sabido por todo el mundo, ¿por qué hay muchas personas que no lo practican?

La clave del ejercicio es practicar la actividad que nos gusta, ya sea bailar.., todas valen, (patinar, bicicleta, actividades con balón, nadar.etc.).  Realmente practicar ejercicio puede ser realmente económico, y modula la parte ambiental en nuestra salud que es determinante.

LA GENÉTICA CARGA EL ARMA PERO EL ESTILO DE VIDA TIRA DEL GATILLO

Recordar, adultos como mínimos 150 minutos de actividad de moderada a vigorosa y los niños 60 minutos de actividad vigorosa sirios.

Pocas son la herramientas que nos preservan tanto la salud y previenen de enfermedades, como el ejercicio físico.

¡Actívate!

CONTAMINACIÓN AMBIENTAL Y NUTRICIÓN

Con la llegada de la industrialización y la evolución social que hemos tenido en las últimas décadas la contaminación ambiental ha crecido exponencialmente, según la OMS (organización mundial de la salud) es la causa de numerosos problemas cardíacos y respiratorios, con consecuencias de mortalidad.

La exposición a partículas contaminantes como el óxido nitroso (NO2), ozono (O3) y las partículas en suspensión, hacen comprometer la salud de los seres humanos.

Con la nutrición (una dieta sana y equilibrada) podemos paliar los efectos negativos y adversos que sufrimos de la contaminación.

Los estudios demuestran que la dieta rica en frutas, verduras, legumbres, cereales de grano integral, el aceite de oliva y el pescado son alimentos antioxidantes y antiinflamatorios y todos ellos los encontramos en nuestra dieta mediterránea.

Según el hospital clínico de Barcelona por obra de Ramón Estruch, se llega a reducir en un 30% las complicaciones cardiovasculares. La clave está en la acción antioxidante y antiinflamatoria de algunos alimentos de nuestra dieta mediterránea. Previenen y reducen los daños que la polución causa en nuestro organismo.

Los alimentos antioxidantes ayudan a mantener controlados los radicales libres que produce la oxidación y los alimentos antiinflamatorios modulan la respuesta inmunológica, favoreciendo la homeostasis (equilibrio metabólico).

  • Alimentos ricos en polifenoles como el Té, Cacao, Legumbres, Tomates, Cebollas, Pimientos, etc. protegen nuestras células del proceso de oxidación.
  • Vitaminas antioxidantes por excelencia son la vitamina C y la vitamina E,
  • Alimentos antiinflamatorios son los que contienen grasa de pescado (omega 3) y
  • Grasas poliinsaturadas encontradas en los frutos secos y las semillas.

Por lo tanto una dieta mediterránea equilibrada y variada nos asegura tener buenas sustancias en el organismo para combatir la contaminación ambiental.

Recordar que el concepto de dieta mediterránea lleva implícito la realización de ejercicio físico de manera regular. Según la OMS los adultos deben realizar 150 minutos de actividad de moderada a la semana y los niños 60 minutos de actividad vigorosa al día.

 

 

 

 

HERRAMIENTAS PARA COMBATIR EL ESTRÉS

“La vida no es esperar a que pase la tormenta, es aprender a bailar bajo la lluvia”

El estrés, hoy día, afecta a una gran parte de la población, existe el estrés agudo, estrés crónico, físico, emocional… Nuestro organismo responde ante esta demanda y tiene respuestas hormonales a través de neurotransmisores, etc.

Los datos de las investigaciones muestran un incremento notable en el uso del sistema de salud en momentos de estrés. Es un factor importante en muchas enfermedades, desde dolores de cabeza a enfermedades cardiacas, deficiencias inmunológicas o problemas digestivos.

Tenemos tres fases cuando padecemos estrés:

  • fase de alarma,
  • de resistencia y
  • de agotamiento.

En la fase de alarma nuestras glándulas adrenales, que se encuentran en los riñones, segregan adrenalina y noradrenalina que nos prepara para una acción inmediata.

En la fase de resistencia, si la situación persiste, se activa una vía neuroendocrina que se expresa por la secreción de corticoides a partir del hipotálamo y libera un polipéptido llamado factor liberador de corticotropina (CRF). Se desencadenan una serie de reacciones endocrinas que actúan como tranquilizante tisular, potencia la tolerancia con el agente agresor. Son pues, hormonas con valor adaptativo y restaurador. La fase de resistencia no puede sostenerse por tiempo indefinido.

Fase de agotamiento: no estamos diseñados para soportar estrés de manera constante; cuanto más tiempo nos exponemos a él, menos capacidad de soportarlo tendremos. Si los nutrientes necesarios para la síntesis de estas hormonas suprarrenales no se aportan en la dieta en las cantidades necesarias, el organismo no puede combatir de manera eficaz el estrés.

Las médulas adrenales se agotan y dejan de producir las hormonas que nos ayudan a combatir el estrés.

Los Nutrientes aliados en la fisiología del estrés:

La vitamina B5 o ácido pantoténico: Mejora las reacciones frente al estrés, aumenta la resistencia a la fatiga. Previene el aumento de cortisol frente a situaciones de fuerte estrés.

Es interesante tomar un suplemento de esta vitamina aliada en personas que sufren estrés físico y emocional.

Las vitaminas del grupo B (hidrosolubles) son necesarias para combatir el estrés, la vitamina C ayuda en la función adrenal y disminuye los niveles elevados de cortisol. La fisiología del estrés aumenta nuestra demanda por esta vitamina “antioxidante”. El magnesio tiene un efecto profundo sobre la excitabilidad neuronal, aminoácidos como L-Tirosina, L-Teanina, GABA, están involucrados en la función neurológica y son esenciales para la estabilidad mental. Un ejemplo claro es que para que haya Serotonina en el cerebro, que es un calmante natural, se necesita triptófano y vitamina B6 (Piridoxal).

Por lo tanto, a través de los nutrientes de nuestra dieta se puede abordar la fisiología del estrés y apoyar a nuestro organismo a combatirlo “para sentirnos mejor”.